Así lo explica el investigador principal, Javier Garzón:
“El abuso del cannabis rompe el preciado equilibrio entre excitación (NMDAR) e inhibición (cannabinoides endógenos) y empuja el plato de la balanza hacia la inhibición, y por tanto permite una mayor actividad de aquellos otros sistemas controlados negativamente por el NMDAR, como el dopaminérgico”
Podeis leer el artículo completo haciendo click aquí. (Fuente Medciencia. Agradecimientos a la Dra. Lloreda).